Oráculo 1

sábado, 3 de abril de 2010

La serpiente y la paloma.


"¡Observen!. Los mando delante como ovejas en el medio de los lobos: sean por eso astutos como serpientes e inocentes como palomas". Mateo, 10, 16.

El mundo es un lugar peligroso, competitivo. Hay lobos rondando por doquier que quisieran devorarnos. Hay fuerzas políticas, económicas, sociales, que prefieren tenernos controlados y encerrados. Las casas comerciales  y los bancos nos ofrecen tarjetas, créditos, préstamos de consumo. Son lobos intentando robar nuestra libertad. 

Me gusta este pasaje del evangelio que parece entrar en franca contradicción con poner la otra mejilla chorrocientas veces. Pero la Biblia es un texto que has sido reescrito y manipulado hasta la saciedad por los lobos.

El Maestro al pedirte ser astuto como serpiente, se refiere a que estés atenta a la negatividad antes de que te la tiren encima. Se prevenido. No pongas el pecho para recibir todas las malas ondas, pesadeces, y ataques a tu autoestima. Para ser astuto se requiere estar despierto, atento, mirando a la distancia los eventos que vienen. Las ovejas no caxan ná. Estan obsesionadas con el pastito delante de sus ojos y serán presa fácil de los lobos.

Pero ser sólo serpiente, es enfrentar el mundo con desconfianza, con paranoia, cerrándose y protegiéndose en demasía. Por ello el equilibrio con la paloma, la inocencia, el ser niño. Ser astuto y niño a la vez. Hermosa y perfecta combinación de carácteres. 

La paloma pone la mejilla una sola vez. Si se avecina un segundo golpe, se escabulle o se defiende con sus poderosos colmillos.